Fernando Antón Bernalte. Coronel de Infantería diplomado en OE.
Las unidades que componen el MOE se han adaptado a la perfección al escenario actual que se contempla en el prólogo de la Doctrina para el Empleo de las Fuerzas Armadas:
«El entorno estratégico mundial actual reviste una enorme complejidad y esconde una permanente incertidumbre, los rápidos procesos de transformación, la permeabilidad de todo tipo de fronteras, la variedad y persistencia de los conflictos, la diversidad de actores y las diferentes naturalezas y alcances de las amenazas afectan a nuestras expectativas de seguridad al poner en riesgo la paz… Este escenario, en el que la seguridad es responsabilidad de todos, exige que esta sea abordada desde enfoques integrales y globales… Este nuevo entorno requiere de ellas (las Fuerzas Armadas) una adaptación militar constante para optimizar su eficacia operativa…»
Empezando por la evolución de las propias misiones de operaciones especiales, que han experimentado un cambio sustancial, desde las típicas misiones de las patrullas de reconocimiento especial enterradas en el terreno o los golpes de mano sobre objetivos en el interior de territorio enemigo, sin olvidarnos de la organización de guerrillas, hasta otras más actuales como las de entrenamiento, asesoramiento y asistencia militar a fuerzas amigas, o las más específicas de rescate de rehenes, finalizando por la misma estructura de mando y control que, en la actualidad, busca a través de diferentes órganos la integración de las operaciones especiales de una manera global, lo que contribuye de manera significativa como un elemento más de las Fuerzas Armadas a la acción del Estado.
El MOE no solo ha sabido evolucionar en sus misiones y adiestramiento, sino que es capaz por sí mismo de generar gran parte de estas estructuras en apoyo a la acción conjunta y aporta unas capacidades únicas para asumir cometidos específicos de operaciones especiales, así como de planeamiento y asesoramiento al Mando Componente Terrestre.
Este artículo pretende dar una visión general sobre las misiones y estructuras de mando y control de operaciones especiales, dirigida a que el lector no especializado tenga una idea general de estos conceptos, por lo que se ha intentado evitar definiciones doctrinales o reglamentarias.
MISIONES
Aunque las misiones de operaciones especiales no han variado en los últimos años y siguen siendo las que se contemplan en las diferentes doctrinas de OE, tanto específica como conjunta y aliada: reconocimiento y vigilancia especial, acción directa y asistencia militar; no es menos cierto que la forma en que se desarrollan estos cometidos o las actividades que apoyan sí han experimentado una evolución para adaptarse a los nuevos escenarios y entornos a los que se hacía alusión al principio del artículo.
Del mismo modo, el MOE mantiene a alto nivel la capacidad de realizar acciones típicas de acción directa, como las ejecutadas en Irak en 2003, con asalto por sorpresa a objetivos donde se detuvo y puso a disposición de las autoridades a personal en busca y captura, que se encontraba en posesión de armamento ligero, contracarro y antiaéreo, o la operación de recuperación de la soberanía española sobre el islote de Perejil. Sin embargo, en la actualidad este tipo de misiones son las menos frecuentes y cobran mayor importancia las misiones contraterrorismo, muchas de ellas llevadas a cabo con fuerzas de otros países o a través de ellas.
Acción directa
A pesar de ser los cometidos que con menos frecuencia se ejecutan, son los que más dedicación exigen debido a su complejidad y repercusión. Estos también han sufrido una gran evolución y, aunque sigue estando vigente el antiguo concepto de golpe de mano o emboscada con un movimiento (infiltración) previo oculto, silencioso y a pie, en muchas ocasiones ha evolucionado a acciones precisas mediante operaciones de guiado de armamento o acciones contra objetivos en amplias zonas de terreno desértico que requieren el empleo de medios de movilidad de operaciones especiales (ágiles, ligeros, con gran autonomía y potencia de fuego suficiente) y su integración con medios aéreos (tanto de ala rotatoria como fija).
Reconocimiento y vigilancia especial
La obtención de información sobre objetivos, terreno, amenazas, acciones realizadas, etc., continúa siendo fundamental. El mayor cambio en este tipo de cometidos proviene del diferente entorno en el que se desarrollan la mayor parte de las operaciones actuales, un entorno poblado y en ocasiones urbano. Para ello nuestras UOE están adiestradas y equipadas para la obtención de información usando tanto medios de vigilancia desatendidos como la observación directa y la interacción con la población, en un ambiente que puede tornarse hostil, para lo cual disponen de medios de autoprotección y procedimientos para recibir apoyo en caso necesario, sin olvidarnos del uso, cada vez más extendido, de medios de información, vigilancia y reconocimiento (ISR) a través de RPAS, ya sean de empleo por parte del propio equipo de operaciones especiales en el terreno, del SOTG o de otras fuerzas del Teatro de Operaciones. Estas características las hacen idóneas para cumplir estas misiones de información en aquellos escenarios alejados de fuerzas propias.
Asistencia militar
Quizás sea en este campo donde más se puede apreciar la evolución en los cometidos de operaciones especiales y en los que tiene una mayor influencia el principal activo de las UOE, el militar de operaciones especiales; desde el jefe del Special Operations Task Group (SOGT), organización operativa de entidad grupo, que ejerce su influencia en los generales de las fuerzas apoyadas, hasta el soldado que, con su empatía y profesionalidad, no solo sabe transmitir sus conocimientos sino ganarse la confianza y respeto del personal al que apoya.
Estos cometidos en la actualidad se adaptan a cada escenario y cubren diversas actividades, algunas son las siguientes:
-TAA (Train, Advise and Assist) / A3E (Advise, Assist, Accompany and Enable), desarrollado profundamente en Afganistán e Irak; a través de unidades especiales del propio país se les aconseja e instruye en adiestramiento, se les asesora en el planeamiento y en ocasiones se les acompaña para ayudarles en la conducción de las operaciones y se les facilita ciertas capacidades de las que carecen.
-MTT (Mobile Training Teams): despliegue por tiempo limitado de pequeños equipos de OE para adiestrar en capacidades específicas a fuerzas especiales de otros países para mejorar su adiestramiento y contribuir a mejorar la seguridad regional. Desarrollado en varios países del Sahel y el norte de África.
Rescate de rehenes
Por supuesto no nos podemos olvidar de las misiones de rescate de rehenes, las cuales requieren unidades permanentemente instruidas y adiestradas en este cometido. Aunque las unidades especiales de la Policía o Guardia Civil son las idóneas para estas acciones en zonas controladas, el MOE es la única unidad de las Fuerzas Armadas con unidades adiestradas específicamente para llevar a cabo estas acciones en territorio hostil o no controlado. En este sentido, cabe señalar que durante todo el año el MOE realiza colaboraciones con las citadas unidades especializadas de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.
MANDO, CONTROL Y ENLACE: GENERACIÓN DE ESTRUCTURAS
Para que estas misiones y cometidos se ejecuten de manera coordinada y contribuyan a la acción global de las Fuerzas Armadas, el MOE, aparte de generar estructuras de mando y control de diferente entidad, también necesita generar elementos de enlace, coordinación y asesoramiento que se integren en otros cuarteles generales para lograr la acción conjunta y coordinada que asegure el enfoque integral y global tan necesario hoy día.
Estructuras de Mando y Control
En función de la complejidad y el número de operaciones que va a desarrollar el MOE es capaz de generar las diferentes estructuras de mando y control para adaptarse a cada situación. Para lograr la necesaria flexibilidad y adaptación al escenario en ocasiones se puede eliminar algún nivel o asumir funciones de otro.
-Mando Componente de Operaciones Especiales (SOCC) disminuido: aunque normalmente corresponderá al MCOE, el MOE puede generarlo con apoyos, como ya hizo en NRF9/10 y NRF12, o bien proporcionar por sí mismo un SOCC reducido. El SOCC se compone fundamentalmente de varios agrupamientos tácticos, tanto específicamente de operaciones especiales (SOTG) como de medios aéreos de operaciones especiales (SOATG). Dispone de capacidad para planear, conducir y apoyar las operaciones que se ordenen, subordinado al jefe de la Combined Joint Task Force (CJTF) o de la Fuerza Conjunta (FC) que se determine. Normalmente será de carácter conjunto.
-SOTF (Special Operations Task Force): para aquellas operaciones que no requieran la activación de un SOCC, o cuando por la complejidad o distancia el SOCC requiera del despliegue de una estructura de mando y control en el terreno, el MOE puede desplegar con sus capacidades una SOTF o FOE (Fuerza de Operaciones Especiales) para el planeamiento y conducción de las operaciones. Normalmente dispondrá como unidades de maniobras de uno o varios SOTG y de un SOATG, aparte de otros apoyos de combate (fuerzas de apoyo a operaciones especiales) y logísticos.
-SOTG: es la unidad fundamental de empleo para despliegue en operaciones. Generada en función de un GOE, dispone de capacidad de planeamiento, conducción y apoyo a operaciones especiales en su área de responsabilidad. Como unidades de maniobra cuenta con los SOTU (Special Operations Task Unit) proporcionados por sus equipos operativos orgánicos, aunque puede asumir SOTU, SOATU (Special Operations Air Task Unit) y otras unidades agregadas, lo que lo dota de cierto carácter conjunto.
-SOATG: en este nivel se agrupan los medios aéreos (de ala fija y móvil) específicos o conjuntos, subordinado al SOCC/SOTF. Dispone de capacidad para planear, conducir y apoyar las operaciones aéreas e integrarse -con equipos de OE Tierra-Aire en las medidas de control del espacio aéreo.
-SOTU: es la unidad que planea en detalle y ejecuta la acción propiamente dicha. Su composición depende de la acción a ejecutar y se forma en función de un equipo operativo. Puede llevar agregado personal especializado, sin perder por ello su carácter eminentemente orgánico.
-SOATU: plataforma o conjunto de plataformas aéreas de operaciones especiales con entrenamiento y equipamiento específico para apoyar las misiones de operaciones especiales.
Elementos de enlace
Para asegurar que las operaciones que sean planeadas y ejecutadas por estas estructuras que hemos visto en el apartado anterior estén de acuerdo con los propósitos del mando, no interfieran en otras operaciones y generen las sinergias adecuadas con otros mandos componentes, el MOE tiene la capacidad de generar y desplegar una serie de elementos de enlace.
-SOPLE (Special Operations Planning and Liaison Element): destacamento de enlace que se destaca al más alto nivel de conducción de las operaciones, CJTF o FC, para asesorar, ayudar al planeamiento y facilitar la coordinación de las OE en la campaña para conseguir la plena integración de las mismas en la maniobra.
-SOLE (Special Operations Liaison Element): destacamento de enlace que despliega en el Mando Componente Aéreo para coordinar e integrar todos los apoyos aéreos que se requieran e integrar las OE con las operaciones aéreas conjuntas.
-SOLO (Special Operations Liaison Officer): oficial de enlace que se destaca a otros mandos componentes o, excepcionalmente, a gran unidad (GU), para facilitar la coordinación y evitar interferencias entre las operaciones de las UOE y las respectivas convencionales en su zona de acción.
-SOCCE (Special Operations Command and Control Element): cuando se asignan UOE, normalmente de entidad SOTG, para trabajar en la zona de acción o en beneficio de un Mando Componente -o, excepcionalmente, de una gran unidad tipo cuerpo de ejército o división- es necesario desplegar un destacamento de enlace que por una parte asesora, sincroniza y coordina las OE con el cuartel general convencional respectivo y, por otra, ejerce el mando y control de las UOE asignadas que operan en dicha zona de acción. No se debe confundir la asignación de UOE con la ejecución puntual de una operación en la ZA de una GU, para lo cual con la coordinación a través del solo es suficiente.
Llegamos a la conclusión de que el MOE no solo está instruido en la ejecución de misiones de operaciones especiales clásicas y adaptadas a los nuevos escenarios, sino que también es capaz por sí mismo de generar las estructuras con capacidad para ejercer el mando y control de estas operaciones y los elementos de enlace para integrarlas y coordinarlas con la maniobra global.