Comandante (retirado) Antonio Manuel Valero Sánchez
Brigada en la PLMM del GOE III (grupo de fundadores)
Haciendo memoria… en julio de 1984 se funda el GOE Levante con ubicación en la ciudad de Alcoy provincia de Alicante al mando del comandante Tiedra. En el mes de octubre, se crea la Plana Mayor al frente del capitán Bataller que, es a la vez el segundo jefe del Grupo, integrada por las secciones, S1 brigada Valero, S2 sargento Fermín, S3 sargento Otálora, S4 teniente Pallás y sargento 1º Cartagena y como habilitado el brigada Navarro.
Al mismo tiempo, se crea una COE PLM que pasó a mandar el citado teniente D. Francisco Pallás Morote, como auxiliar el brigada Pastor. También se crea una USAC que manda el capitán Villar, pero esta unidad ya no está encuadrada como parte del GOE.
Se fueron incorporando los especialistas. En electrónica el teniente González, armamento brigada Molinés, sanidad ATS teniente Belda, mecánico de vehículos brigada Tormo. La COE 32 proveniente de Paterna en Valencia se ubicó en el campamento Molino Payá a unos 4 kilómetros del acuartelamiento de Alzamora, que hasta 1980 albergaba al regimiento de Infantería Vizcaya 21, trasladándose a la base de Bétera en Valencia.
En junio de 1985, el grupo al completo estaba ubicado en el Campamento Molino Payá en plena Sierra de Mariola. Lo recuerdo como tiempos difíciles, con rivalidad entre las COE y también con la Plana Mayor. Aunque parezca increíble, la carretera comarcal de Alcoy a Bañeres, dividía el campamento en dos, lo que dificultaba la seguridad de este. En el mes de diciembre de 1984, con motivo de la Patrona, se realiza una formación del GOE al completo. Hacía mucho frío, lo normal de Alcoy en invierno, y allí estábamos con uniforme de instrucción, con guantes blancos y mangas remangadas.
Los capitanes de las COE 31 y 32 no querían que los componentes de la Plana Mayor llevásemos la boina verde por no haber realizado el curso de operaciones especiales. Es verdad que la mayoría no lo teníamos; pero conocíamos la legislación y demostramos que la prenda de cabeza la llevaban los destinados en unidades de operaciones especiales tuvieran el curso o no. Los miembros de las COE eran magníficos guerrilleros, cumpliendo sus misiones principalmente en el campo. Nuestra labor administrativa y de apoyo les iba a venir muy bien para mejorar el conjunto.
Lógicamente, no existían archivos en el grupo al ser una unidad de nueva creación. No hay mal que por bien no venga. Con buena gestión se conseguía apoyar a las COE desembarazándolas de la parte burocrática, labor que, anteriormente, se les realizaba en los regimientos de ubicación. Conseguíamos acelerar los procesos, un ejemplo, para legalizar fotocopias de documentos se llevaban los originales y copias a Alicante para que el interventor las legalizará. Se tardaba más de una semana puesto que el interventor, a su vez, se desplazaba de Valencia a Alicante dos veces por semana. Se introdujo la iniciativa de que las copias las legalizará el jefe de la S1 de la Plana Mayor, con el visto bueno del jefe de la Plana y listo. Nunca nos devolvieron ningún documento.
Como el GOE dependía directamente del capitán general de la región, allí se dirigían nuestros escritos. Inventábamos procedimientos que luego utilizaban otras unidades; por ejemplo, la comunicación de una lesión; que por cierto, había más lesiones jugando al futbol que en prácticas arriesgadas como buceo, escalada, etc. Era señal de que se tomaban las debidas precauciones de seguridad en los ejercicios tácticos.
En octubre de 1986, pasa a denominarse GOE Valencia III y se traslada al completo al campamento de Rabasa en Alicante. Lo compartimos con el CIR 8. Al llegar, vuelta a empezar; las condiciones no eran buenas; por ejemplo, los dormitorios de tropa estaban en barracones metálicos. Era la época donde se estaban extinguiendo unidades y acuartelamientos por toda España. En la actualidad en Alcoy no quedan unidades. El acuartelamiento de Alzamora se ha convertido en el centro comercial más grande de la ciudad. El campamento Molino Payá no existe como tal y en sus inmediaciones se ha creado un albergue de animales y la antigua pista de entrenamiento del Vizcaya 21 está abandonada. En Alicante solo queda la base Alférez Rojas Navarrete en Rabasa donde se ubica el MOE.
Recordando aquellos tiempos, al revisar los informes personales de calificación, los llamados IPEC, se pudo observar que se elaboraban con demasiada exigencia, resultando que las calificaciones de los mandos del CIR 8 eran mucho mejores. Sin desmerecer las labores que se desarrollaban en un CIR, pero es incomparable al trabajo de los componentes de un GOE. Las mejoras administrativas eran continuas.
El comandante jefe del grupo como el capitán jefe de la PLMM dejaban plena iniciativa a los mandos, prueba inequívoca de su confianza. Demostrábamos que estábamos al día y conocíamos la legislación. Otro detalle que viene a la memoria, en una ocasión, un oficial dijo que las firmas en los documentos tenían que ir con nombre, apellidos legibles y rúbrica. Hubo que demostrarle con el BOD en la mano, que esa norma estaba desfasada y que, lo último legislado era utilizar la firma que figuraba en la TIM.
La plana se encargaba de hacer las captaciones de conductores, mecánicos, escribientes, enfermeros, cocineros, etc. Una anécdota: no teníamos ordenadores para la gestión. Recuerdo que en la S4 diseñamos un método por códigos para clasificar y archivar la documentación. Cada dígito tenía un significado según su posición y era muy fácil recordarlo. Se necesitaba un grupo coordinado y compacto al completo. Se estaba consolidando la magnífica labor de los guerrilleros con el apoyo de la parte administrativa.
Debemos tener presente la gran labor que realizaban los escribientes, conductores, mecánicos, sanitarios, cocineros, camareros. Que, además, tomaban parte en los ejercicios tácticos del GOE al completo como marchas, guerrillas, escalada… En unos ejercicios tácticos, en la zona de Torremanzanas, estuvo nevando copiosamente. Como los uniformes no eran adecuados para las bajas temperaturas, pasamos mucho frío. Estuve destinado casi 5 años, hasta el cambio de destino al Centro Provincial de Reclutamiento en la misma ciudad, a la sección de informática. Los CPR fueron de las primeras unidades que disponían de ordenadores.
En la época en la que el servició militar era obligatorio y todavía no existía tropa profesional, GOE III y CPR aunaron esfuerzos haciendo un correo masivo a los alicantinos que, por sorteo habían sido destinados fuera de la región. La operación fue un éxito: se captaron más miembros que todos los demás GOE juntos. Posiblemente, este sea uno de los motivos por los que la superioridad ha decidido que todos los GOE se establecieran en Alicante. El esfuerzo, dedicación, entusiasmo, trabajo y entrega de los fundadores pusieron los cimientos para que, en la actualidad, las unidades de operaciones especiales españolas estén consideradas como unas de las mejores del mundo demostrándolo en sus misiones en el extranjero.