El 5 de septiembre del 2022 comenzaba una nueva andadura del Curso de Operaciones Especiales. 133 aspirantes de los Ejércitos y la Armada, Guardia Civil y Ejército de Chile se presentaban en Jaca para realizar las pruebas físicas y psicológicas que les darían acceso a iniciar (y ya veremos…) la enseñanza de operaciones especiales que, si lo terminan con aprovechamiento, será la unión definitiva a la familia de boinas verdes para toda su vida.
Tras varios de días de pruebas, en este nuevo curso escolar se ha tratado de mejorar la selección y para ello, tras pasar este primer corte, 83 oficiales y suboficiales comenzaron la llamada “Subfase de adaptación selectiva”. El propósito de esta adaptación no es otro que poder observar las aptitudes y actitudes de este personal y, tras 3 semanas de curso, poder comenzarlo con la mejor calidad posible.
Las tácticas, técnicas y procedimientos actuales se han adaptado a las necesidades que demandan los equipos de operaciones especiales, pero el espíritu es el mismo con el que comenzaron los alumnos del primer curso; es por ello que, en estas 3 semanas, se ha dado valor a dos asignaturas tan importantes como el tiro y la topografía, así como la resistencia física y psicológica. Los aspirantes comienzan a conocer sus reacciones temperamentales ante situaciones de extrema exigencia física y psicológica, lo que les dará con toda seguridad una superioridad incontestable ante el enemigo en acciones de combate típicas de las unidades de operaciones especiales.
“Mantenerse siempre lo más capaces ante situaciones de máximo estrés”, de ello se han ocupado un plantel de profesores con amplia experiencia en unidades de operaciones especiales tanto en el adiestramiento diario como en misiones reales. A los profesores titulares de la EMMOE se unen varios profesores proporcionados por el Mando de Operaciones Especiales, Fuerza de Guerra Naval Especial de la Armada y el Escuadrón de Zapadores Paracaidistas del Ejército del Aire y del Espacio, lo que da una idea de la importancia que supone dentro de las Fuerzas Armadas (FAS) la capacidad de operaciones especiales.
Así, el 3 de octubre, 58 alumnos comenzaron el LXVII Curso de Operaciones Especiales a los que les queda casi todo el camino por recorrer. Cada día que pasa es un día más de aprendizaje de la mayor calidad. No todos alcanzarán ese ansiado día de entrega de diplomas el 8 de julio de 2023, pero estamos seguros de que aquellos que lo alcancen serán los que tengan las capacidades necesarias para formar parte de los equipos operativos de nuestras FAS y poder así empezar a trabajar para alcanzar el nivel de instrucción y adiestramiento que, quizás un día, les lleve a cumplir una misión real con éxito o, incluso, volver a esta EMMOE como profesores. Nuestro objetivo es que España tenga a militares diplomados de Operaciones Especiales capaces de hacer lo que haya que hacer para cumplir su misión.