Ángel López Sánchez
Periodista. Responsable de relaciones institucionales de la Cofradía de Jesús Caído y María Santísima de la Esperanza. Embajador de “Marca Ejército”. Cruz al Mérito Militar, Mérito de la Guardia Civil y Mérito Policial.
“Dedicado a cuantos guerrilleros sirvieron en él, a los de la boina verde”.
Tengo grabados en mi corazón tres recuerdos imborrables. El primero de ellos, cuando concluí mi estancia militar en el entonces CIR nº 5 (año 1982), ubicado en Cerro Muriano (Córdoba); otro, la desaparición en 1988 del Regimiento de Artillería, Información y Localización de guarnición en Ciudad Real; y otro pellizco más, en este caso más reciente, cuando en 1996 desaparece el Grupo de Operaciones Especiales Ordenes Militares I, acuartelado en la base de San Pedro, en Colmenar Viejo (Madrid).
Me solicita mi querido coronel D. José María Armendáriz La-Roche, unas líneas para la edición de una publicación relacionada con esta entrañable unidad.
No puedo dejar de citar el año 1992, fecha clave para nuestro hermanamiento, el de la Muy Ilustre y Real Cofradía de Nuestro Padre Jesús Caído y María Santísima de la Esperanza de Valdepeñas, con el GOE I, que durante unos meses estuvo dando protección a la línea férrea en el tramo comprendido entre Alcázar de San Juan y Despeñaperros.
Los boinas verdes, con el teniente coronel Armendáriz al frente, quisieron despedirse tras cumplir eficazmente la misión encomendada por la superioridad. Por eso, en el mes de noviembre de 1992, organizaron un acto de agradecimiento denominado “Homenaje a la Mancha”. Fue un 21 de noviembre y se llevó a cabo con una parada militar que acogió el paseo de la Estación. Posteriormente nos trasladamos al paraje de “Baños del Peral”.
En esas fechas, José María Armendáriz, el recordado Constantino García Palomo y otros, fueron a hablar con el alcalde de Valdepeñas, que lo era Salvador Galán Ruiz-Poveda, a su vez director del Centro de la Universidad Nacional a Distancia (UNED), y los remitió a un periodista que por aquella época trabajaba en Onda Cero Radio Valdepeñas, que “podía echarles una mano dado su acendrado espíritu militar” y en ese momento surgió mi vinculación personal e institucional con el querido GOE I.
Se realizó un hermanamiento a requerimiento del entonces coronel gobernador militar, D. Juan Luis del Hierro Gil (dep), y encontramos el respaldo del GOE I y el refrendo de la entonces Capitanía General de la Región Militar Centro, y lo rubricamos en Valdepeñas.
Desde entonces y hasta su desaparición, los boinas verdes, los guerrilleros del machete con laureles de victoria nunca faltaron a nuestra procesión de Viernes Santo, ni a cuantos actos organizamos. Y nuestra presencia en su acuartelamiento fue constante y muy frecuente.
La tristeza nos embargó cuando en 1996, el GOE I (y eso que altos mandos decían que no) dejó de existir a efectos administrativos. Aún ahora que se han cumplido 27 años, a mí no se me olvidan los valores que me transmitió esta emblemática y señera unidad de nuestro Ejército de Tierra y recuerdo con verdadero afecto a cuantos mandos y personal de tropa conocí, que Dios ha querido que con muchos de ellos haya tenido continuidad nuestra relación personal y, a veces, profesional.
Hago mío uno de vuestros lemas “Orgulloso estoy de ser guerrillero. Jamás estaré cansado y nunca me rendiré”.
A todos cuantos se han quedado en el camino, mi oración y recuerdo; a los que todavía estamos aquí, por mor de la gracia de Dios, mi agradecimiento y mi lealtad, porque conserváis la principal divisa, la del honor.
Valdepeñas, a 14 de noviembre de 2023