Inauguración del Monolito Conmemorativo de la estancia de la COE 61 y del GOE V en San Marcial, Burgos
Isidoro Jiménez guerrillero de la COE 61
El día 19 de octubre tuvo lugar un encuentro muy emotivo en la Base Militar Cid Campeador donde está ubicada el regimiento de infantería San Marcial que durante 20 años (1976-1996) albergó a la COE 61 y al GOE V.
Con el fin de perpetuar el recuerdo de este hecho, la Asociación de Veteranos Boinas Verdes del Norte con la colaboración del coronel Javier M. de Lagos y los comandantes José Mª Calzada y Pablo Valencia se embarcaron en la construcción de un monumento que recordase la estancia de la COE 61 y las COE 51 y 52 del GOE V en el acuartelamiento de San Marcial.
La jornada comenzó, como era de esperar, con la meteorología que suele producirse en Burgos, es decir, algo fresco y con amenaza de lluvia que por suerte no se produjo.
El frío ambiental fue rápidamente combatido por los calurosos saludos entre los veteranos y mandos asistentes. La alegría de los encuentros entre amigos que hacía años, incluso décadas, no se veían fue desbordante.
Tras una breve visita por las zonas más características de la Base, el coronel D. Luis Téllez, como capitán de la COE 61 y primer comandante del GOE V pronunció unas palabras recalcando que somos especiales porque somos guerrilleros y relató varias anécdotas ocurridas cuando mandaba la COE 61, mientras los veteranos permanecían en formación. Tras el discurso, el coronel procedió a la inauguración del monolito.
Finalizado este entrañable acto, tanto veteranos como mandos no perdieron la oportunidad histórica de inmortalizar el momento fotografiándose junto al monumento.
Como buenos guerrilleros, el acto en el cuartel no estaría completo sin un desfile recordando los muchos que realizamos durante nuestra estancia en el periodo militar.
Y para finalizar la jornada no podía faltar el compartir mesa y mantel con los camaradas para lo cual nos trasladamos a un restaurante cercano donde pudimos degustar unas viandas exquisitamente preparadas, aunque lo mejor fue la compañía con que nos regalamos todos nosotros.