General de División Jaime Íñiguez Andrade
Teniente en la COE 62 (Bilbao). Capitán en la COE 12 (GOE <<Órdenes Militares I>>, Colmenar Viejo, Madrid)
Algunas veces se puede pensar que el adiestramiento de las COE, o de los treinta y pico primeros cursos de operaciones especiales, o incluso de los GOE, está obsoleto y fuera de actualidad. Por supuesto, los fundamentos morales y físicos de siempre se mantienen: esfuerzo, sacrificio, compañerismo, audacia, confianza en los camaradas y en uno mismo, etc. pero que alguna de las misiones ya no son las propias de las actuales unidades de operaciones especiales (UOE) y que por tanto hay que desechar parte de las actividades que siempre se habían hecho. Los actuales conflictos confirman que lo que se hacía en las COE, luego en los GOE y en los primeros treinta y pico cursos de operaciones especiales es de completa actualidad.
En particular, me refiero al adiestramiento en guerrillas y contraguerrillas que tanto en estas unidades como en el curso de operaciones se realizaban y que era, en muchos casos, la actividad principal del año.
Efectivamente, si se observa el conflicto en Ucrania o el más reciente en la franja de Gaza, se puede afirmar que los conocimientos de cómo se organiza, adiestra, equipa, actúa una guerrilla o contraguerrilla siguen siendo necesarios en la actualidad. Además, no solo en escenarios donde se combata en esa modalidad, total o parcialmente, estos conocimientos son muy convenientes también en los conflictos de alta intensidad.
Se puede resumir lo que está ocurriendo en Ucrania de la siguiente manera: tras unos meses de preparación, Rusia invade parte de esa nación el 24 de febrero de 2022 (ya había invadido Crimea en 2014), pudiendo ocupar un territorio significativo que luego ha ido perdiendo hasta situarse, en noviembre de 2023, en una especie de tablas en las que ninguno de los dos contendientes principales gana terreno de manera definitiva.
Independientemente de cómo acabe esta guerra (que a España y todo occidente conviene que gane Ucrania), lo cierto es que se conoce qué han hecho (o qué podrían haber hecho) las unidades de operaciones especiales (UOE) de ambos bandos. Puesto que en España no se contempla iniciar un ataque ni individualmente, ni como miembro de la OTAN, nos fijaremos en lo que han hecho las unidades de operaciones especiales ucranianas.
Primero, durante la preparación rusa de la invasión, colaboraron en el establecimiento de un movimiento de resistencia, incluyendo lo que podríamos llamar una Organización Clandestina de Apoyo (OCA, en adelante). Todo ello en suelo propio, ante la posibilidad de que, como luego ocurrió, Rusia les invadiera. También prepararon escondites para municiones, armamento, alimentos, medicinas, posibles ubicaciones de puestos de mando, bases de patrulla, etc. que más tarde les está sirviendo para sus acciones en el territorio ocupado y para poder mantenerse durante días en esa zona.
Una vez que Rusia inició el ataque, la labor de las UOE han sido las clásicas: localizar objetivos de alto valor y, en su caso, iluminarlos, operaciones de guiado terminal; acciones contra puestos de mando, centros de transmisiones, unidades logísticas, vehículos especiales, etc. en forma de golpes de mano por sorpresa y muy eficaces; también han contribuido con la evaluación de daños (battle damage assessment, BDA, en inglés), tan necesario para saber si el objetivo ha sido destruido o necesita que se repita alguna acción (con la superioridad aérea rusa, los medios aéreos propios, tripulados o no, no sirven para efectuar un efectivo BDA). Además, han contribuido con la resistencia para que sus actividades estén coordinadas con el plan de campaña definido. Estas unidades de operaciones especiales ucranianas estaban en algunos casos <<asignadas>> a unidades convencionales para ciertas acciones (en general, para apoyar en la designación de los fuegos de largo alcance de precisión: localización, iluminación, BDA) y, en otros casos, actuaban independientemente directamente dirigidas por el Mando de Operaciones Especiales ucraniano contra objetivos de alto valor operacional o incluso estratégico.
Como se observa, las acciones que se están llevando a cabo en esa acción, coinciden perfectamente en el tipo de adiestramiento que siempre han realizado las COE y luego los GOE y que también se realiza hoy en días en las UOE, excepto en lo referente a la guerra de guerrillas.
En el caso particular del establecimiento de una OCA, esta no es solo necesaria para colaborar con las posibles acciones de la resistencia, es también fundamental para ejecutar otras de las misiones propias de las UOE: la obtención de información y la recuperación de personal aislado en zona hostil.
Una de las misiones de siempre de las UOE es la de proporcionar inteligencia al jefe de la operación que le ayude a <<comprender>> la situación; no se trata de elaborar informes basados en datos estadísticos muy bien sistematizados, va más allá: consiste en conocer el <<sentir>> de la población para una mejor <<comprensión>> de la situación (1). Son ojos especializados. Es lo que ahora se incluye en el concepto de Reconocimiento Especial, para lo que se debe de contar con fuentes locales, que formarían parte de esa organización tipo OCA.
En cuanto a la recuperación de personal aislado (ISOP, por sus siglas en inglés: isolated personnel), la responsabilidad de esta acción recae en los jefes de la unidad a la que pertenezca el ISOP; cuando no pueden llevarla a cabo por sus medios acuden a sus órganos superiores hasta que, en su caso, llega al mando conjunto de la operación. Este puede optar por llevarla a cabo mediante una operación conjunta, normalmente con gran profusión de medios aéreos, en lo que se podría considerar como una recuperación <<convencional>>, ya sea a través del Combat Search and Rescue (CSAR) o Combat
Recovery (CR), en función de si el personal aislado está o no adiestrado y equipado para asistir a la unidad que llevará a cabo la recuperación. Si lo anterior no es viable, se puede considerar llevar a cabo la recuperación del personal aislado mediante la <<Non-conventional Assisted Recovery>> (NAR por sus siglas en inglés, recuperación asistida no convencional de personal aislado), o mediante la <<Unconventional Assisted Recovery>> (UAR, por sus siglas en inglés). La traducción al español de <<non-conventional>> y <<unconventional>> es prácticamente similar, aunque se podría considerar que cuando se dice lo segundo (<<unconventional>>) se refiere a lo relacionado con la guerra irregular. En la Organización del Tratado para el Atlántico Norte (OTAN), el término <<unconventional>> se refiere normalmente al empleo de guerrillas y contraguerrillas; por extensión, <<unconventional>> se relaciona con lo que tenga que ver con movimientos guerrilleros y/o contraguerrilleros. Cualquiera que sea la traducción, NAR se lleva a cabo cuando los medios convencionales no se pueden utilizar y en su lugar se realiza la recuperación del personal a través de unidades de operaciones especiales en acciones quirúrgicas, organizaciones no gubernamentales, agencias, organizaciones internacionales, terceros, etc. UAR, por su parte, es una modalidad propia de operaciones especiales: es el NAR llevado a cabo por unidades de operaciones especiales a través de redes indígenas ya establecidas; en otras palabras, apoyándose en una OCA.
Observando el escenario actual y las potenciales amenazas, se podría argüir que España no está en la misma situación que Ucrania, ni que los países bálticos, fronterizos con Rusia, por lo que sería innecesario que las UOE españolas se adiestraran en todo lo que implica la guerra irregular. En lo que respecta a OTAN y por no estar en primera línea, es difícil asumir que una posible invasión de Rusia llegara hasta nuestro territorio, aunque sí podría apoyar a naciones que sí lo están. En cualquier caso, España tiene su flanco sur, sus planes de contingencia, y no se puede excluir que hubiera que recuperar personal aislado en zonas hostiles y que por tanto tuviera que realizar NAR (o UAR) para lo que la existencia de una OCA, en cualquier forma, es fundamental, además de poder contribuir con otro de los cometidos de las UOE, el reconocimiento especial, como se ha mencionado anteriormente
Para el establecimiento de una verdadera OCA se requiere tiempo, y no se puede organizar con solo el empleo de una UOE; los servicios de inteligencia tienen que intervenir (entre otras cosas, para valorar la fiabilidad del personal integrante), también los ministerios de Interior o/y de Justicia (para posible protección de las familias, en caso de ser descubiertos, redacción de seguros, coberturas legales, etc.). No es un asunto solo militar. En los más de treinta primeros cursos de operaciones especiales, el establecimiento de una OCA, saber cómo se organiza y el trabajar con sus procedimientos era una parte fundamental del mismo (sobre todo ¡en los fines de semana!) para la más realista ejecución del ejercicio final de curso, cuando se ponía en práctica todo lo aprendido y se activaba la OCA, con un grado de realismo extraordinario. Ese adiestramiento fue de gran valor en las misiones que las UOE llevaron a cabo en Bosnia y Kosovo en la década de los 90 del siglo pasado y sigue siendo necesario hoy, a la luz de los conflictos actuales.
“El adiestramiento de los GOE ¿se ha quedado obsoleto?”
Soto del Real, a 30 de noviembre de 2023
(1) Del Libro <<Las acciones no (todas) contadas de las UOE españolas>> (del autor del artículo), pág. 29.
